Despiden incumplidores para ordenar el Gobierno provincial
Una de las cesantías fue requerida, por la Jefatura de Policía, durante el gobierno actual y el gobernador la resolvió con celeridad
El gobierno provincial neuquino sigue adelante con su decisión de eliminar los gastos innecesarios del Estado, lo que implica el despido de aquellos agentes que no cumplen con sus obligaciones éticas, laborales o legales. Lo nuevo es que esta semana se conocieron otras tres cesantías: la de dos ahora ex policías y el de un portero de escuela. Los casos son distintos entre sí; una policía fue acusada de estafa, otro purgó varios días de arresto policial por distintas indisciplinas y el tercero incurrió en múltiples inasistencias injustificadas.
Dos de los despidos se habían solicitado durante la gestión del ex gobernador Omar Gutiérrez, pero se resolvieron ahora, luego de que el gobernador Rolando Figueroa impartiera la orden de acelerar los trámites para que aquellos que no lo merecen sigan cobrando sueldo del Estado. El tercero fue solicitado durante la gestión de Figueroa y se resolvió con celeridad (a diferencia de lo que en otros tiempos ocurría).
Uno de los despedidos es Juan Carlos Pino, quien era auxiliar de servicios en la Escuela Primaria N 121 de la ciudad de Neuquén. El 6 de octubre de 2022, el Consejo Provincial de Educación (CPE) le inició sumario administrativo, por presunto abandono de cargo. La acusación se argumentó en los faltazos en los que, según se dijo, incurrió el 18 y 21 de febrero; como así también el 2, 4, 7, 14, 18, 21 y 23 de marzo; 5, 6, 7, 8, 11, 12, 13, 18, 19 y 21 de abril; 2, 3, 5 y 6 de mayo; 10, 13, 14 y 15 de junio, todos de 2022.
En el expediente dice expresamente lo siguiente: “… Se evidencia que el señor Pino al tomar como actitud normal y habitual de trabajo la incomparecencia a sus deberes como auxiliar de servicio, demuestra que ha ejercido sus obligaciones con ineficacia y negligencia, en total desinterés no sólo a sus deberes laborales, sino también en desinterés de las necesidades propias de la Institución, a la cual el mencionado presta tareas y en evidente perjuicio a sus compañeros de labor, no considerándose de esta manera para los mencionados digno de confianza laboral, al incomparecer sin -siquiera- aviso previo alguno”. El dos de octubre último, el Ejecutivo provincial le impuso la sanción de cesantía de los cuadros de la administración pública provincial.
En otro de los casos, el gobernador decretó la destitución por cesantía de la ahora ex cabo de Policía, María Celia Gómez. El despido fue solicitado por la Jefatura el 22 de noviembre de 2023. En el expediente se destaca que el 3 de octubre de 2022 una empleada policial radicó una denuncia judicial en la Comisaría N 34 de Mariano Moreno, por el faltante de dinero en su caja de ahorro. Alguien había adquirido dos préstamos, al tiempo que había realizado múltiples compras online y extracciones de dinero. Luego hizo una ampliación de la denuncia y acusó a Gómez, quien la había ayudado a adquirir la clave “Home Banking”. Figueroa resolvió rápido.
El tercer despedido es el de un tal Nicolás Gustavo Cenci, quien hasta el 2 de octubre era agente nuevo cuadro (oficinista) de la Policía. El 27 de diciembre de 2023, ya en el gobierno de Figueroa la Jefatura de Policía de la provincia de Neuquén solicitó al Poder Ejecutivo su destitución por cesantía.
La medida se justificó en que el agente registraba en el período comprendido entre el 4 de octubre de 2022 al 18 de agosto de 2023, un total de 84 días de arresto policial, lo que significa una falta muy grave. El despido fue rápido, ya que el proceso administrativo se realizó con celeridad. Estos despidos se suman a otros que se conocieron durante los últimos meses y que forman parte de la purga.